_linkódromo: cinemagraphs

a) Sé que esto no es, ni mucho menos, nuevo.

b) La esencia de un buen linkódromo no es siempre sacar a relucir novedades, si no redescubrir pequeñas joyas que merecen ser revisadas cada cierto tiempo.

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Previa aclaración, pasaré a explicar qué es el cinemagraph, y cómo este formato, a caballo entre el gif animado y la fotografía, es un ejemplo clarísimo de que a veces para saltar hacía delante hace falta dar un par de pasos hacía atrás.

Nacido durante la New York Fashion Week de este pasado febrero, de la mano de la fotógrafa Jamie Beck y el diseñador Kevin Burg, esta nueva manera de mostrar la fotografía combina el movimiento utilizado en el gif con la calidad e inmovilidad de la imagen estática; pero, y aquí es donde nacen las diferencias más importantes, no solo se distancia de su primo lejano, el susodicho gif, por la calidad de imagen, si no también por la conceptualización.
Al contrario que esas famosas animaciones que vieron la luz a finales de los ochenta y llenaron internet durante la década de los noventa, basadas en la imitación de diversos videos mediante la continudad de frames (creando así el "efecto película"), el cinemagraph - que también es técnicamente un gif - imita a la fotografía: busca un plano, un enfoque, narrar una historia en una sola instantánea, pero tamizada con un movimiento sutil. No eres consciente de que se mueve hasta que se mueve.

Aplicado sobre todo al mundo de la moda, se posiciona como una posible sustitución a la imagen estandar en medios digitales, ya que el video no ha conseguido ser el reemplazo que muchos pregonaban, tiempo atrás, debido a sus caraterísticas técnicas, el peso de sus archivos y el hecho de que a veces el usuario se puede sentir abrumado ante una cantidad ingente de movimiento. Por supuesto, todo esto se susurra en los ambientes y blogs dedicados a la publicidad, moda y diseño, ya que pese al aumento de popularidad de este formato, el gran público sigue sin conocerlo.

Ahora bien, es innegable que para muchos este tipo de tecnologías, desde el cinemagraph hasta la realidad aumentada pasando por el código QR, son las que abren puertas a cientos de posibilidades comunicativas y creativas.