What's this?



Te levantas alrededor de las 13:25; en el suelo, al lado de tu cama, hay un par de libros: "Guía de Cócteles" y "El País de las Últimas Cosas". Lo primero que haces es encender el ordenador; mientras se carga la bandeja de entrada de tu correo, pones un tema de dubstep (¿o era house, de ese que te niegas a reconocer públicamente que escuchas?) que te bajaste ayer, mientras terminabas unos diseños para un logo que, por cierto, vas a revisar. Porque ni recuerdas cómo quedó.

Después de leer cuatro mails y medio, vas a la cocina a por un vaso de zumo, mientras piensas "no, definitívamente, lo mío no es la publicidad. Tenía que haberme dedicado a pinchar música o haber escrito esa maldita novela con la que me haría rico". También te valdría que algún museo de arte moderno te diese un cheque en blanco por tus piezas de videoarte o tus fotografías pasadas de moda.

Mientras bebes el zumo diréctamente del tetrabrik y organizas los siete post-it's que tienes pegados encima de tu mesa (si, otra vez más vas a llegar tarde a tu cita para comer), te acuerdas de que hoy te tocaba actualizar ese blog sobre publicidad y comunicación que abriste hace un par de meses. ¿O tal vez tocaba el de videojuegos retro que llevas a medias con un amigo? En todo caso, otra vez más, lo piensas "sí, realmente debería olvidarme de la publicidad. Yo no valgo para esto. Todo lo que hago es malo y aburrido".

Te estás duchando y de repente te planteas eliminar tu cuenta en Facebook (si te dejan, que lo dudas), abrir otra con pseudónimo en Twitter y probar de una vez por todas eso de Google+. O mejor, abandonar todo y largarte corriendo a un pueblo abandonado a cultivar patatas y lechugas. Sales, te vistes, coges la cámara de fotos, te metes en el bolsillo esa otra cámara con internet y música al que llamas 'móvil de última generación' y sales de casa, olvidándote de apagar el ordenador. En la pantalla, tres webs abiertas que ni siquiera habías terminado de ojear; dos de diseño gráfico y otra con un claro mensaje: "acuérdate que habíamos quedado para comer".

.-

¿Es acaso esta parrafada un 'what's this?', una definición del blog? Ni sí, ni no, ni todo lo contrario. Así que trata tú de definir la creatividad (más bien, Creatividad), que yo no sé muy bien si hablar de spots en youtube, ilustración clásica o de cómo abordar con estilo a esa pareja tan elegante que pasea por la calle para poder hacerles una foto y colgarla en internet.

Welcome (o algo así).