La marca de tintes para cabellos Koleston nos regala una valla publicitaria - una vez más, la publicidad exterior nos sorprende a su manera - en la que juegan con el recorte y el grosor: la figura central, al más puro estilo stencil, ha sido recortada, de modo que el color de su pelo varía según la luz que recibe por detrás (o, más bien, según la luz que literalmente atraviesa la figura por detrás).
Asímismo, utilizando un grosor adecuado en la vaya que permita crear contraluces, y jugando con las iluminaciones nocturnas, este anuncio varía no solo en base al tono del sol y del atardecer o amanecer, si no también con respecto a la dualidad día / noche.
Y, lo que es más importante: muestra una forma sencilla, adecuada y muy acertada de darle sentido a su mensaje comunicativo. Dicho de otro modo: le dan un enfoque original a su propio producto, sin que éste pierda un ápice. Al fin y al cabo, si venden tintes de colores "naturales", ¿por qué no, como decí al comienzo del post, representarlo con lo más natural que existe, esto es, la propia Naturaleza?
PD: esta acción ni es nueva (creo que tiene ya unos años) ni podemos presumir de haberla llevado a cabo aquí (creo que las gráficas están situadas en Beirut), pero... la creatividad no debería tener fronteras, ni temporales ni espaciales.
Visto en Una Pausa Para La Publicidad
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